sábado, 25 de enero de 2014

LA RAZÓN DE TUS MIEDOS

Resulta poco creíble que las personas vayan por el mundo con el optimismo en la cúspide solo para mitigar o encubrir el miedo que los rodea, que los asfixia en algunos casos. Al presenciar el mundo real con el paso del tiempo y eso es, cuando empiezas a madurar, descubres que las fantasías y lo convencional es un acto necesario, dada la incertidumbre conque esta constituido el mundo.
la vida cobra sentido quizás, para cada uno de nosotros del modo mas inusual, un deseo, un proyecto, una promesa o un acto fortuito. esta forma de engendrar las consecuencias es la única evidencia que tenemos sobre la realidad, de este modo operante, las personas intentan mantener el orden de sus emociones y de sus propias vidas, según la temática social que los gobiernos nos influyen, quiero decir, que cada uno de nosotros hemos salido de un molde establecido y con algunas experiencias útiles y algunas inútiles, vamos resolviendo algunos enjambres, algunas cosas confusas, pero siempre desde una base que surge del hogar, con una religión constituida, de las escuelas con las típicas normal de ética y moral, toda esa energía intelectual para que el individuo sea productivo en la sociedad, como curiosos instrumentos de coexistencia y así mantener en un balance a la raza humana.
Tal vez vaya demasiado lejos, con todo esto expuesto anteriormente, pero ser optimista en realidad es taparte la cara con las propias manos, no eres lúcido, aunque, quiero dejar en claro, que no deseo hacer una apología sobre el ostracismo o el pesimismo, eso ha quedado atrás. Intento a mi modo de ver las cosas, en reflexionar todos nuestros escondites, miedos, maldades, iras, para establecer con cierta seguridad lo que en realidad somos y lo que buscamos en nuestras propias vidas. Por eso, al escribir este manifiesto, busco también mitigar mi propio universo, para así, enfrentar el mundo que me rodea.
Tengo 31 años y soy un hombre que se relaciona satisfactoriamente con las demás personas. Soy en muchas ocasiones tergiversador de la verdad a beneficio mio, cuando estoy en medio de un debate o en una discusión sin importancia, no puedo tomar el control de mis pensamientos y termino convirtiéndome en un energúmeno. ¿Por qué mis actitudes son de ésta manera y no de otra?
la respuesta quizás este en mi infancia.













miércoles, 27 de marzo de 2013

El ocio mejor rentable ( I parte )


Los días se acumulan como pedazos de carne podrida en tu propia casa. Mi nombre es Rumbher, tengo 45 años y vivo con mi gata Serafina, desde hace ya más de 7 otoños; fue un obsequio inesperado de mi antigua novia, Josefa. Siempre nerviosa y descarada al hablar; nos cansamos, aburridos del sentido monótono en que se había convertido nuestra relación. Un día, cuando desperté tarde, ya no estaba ella; todas su ropa, cremas de piel y perfumes, desaparecieron, al terminar de examinar toda la casa y comprobar que había más espacio para mis chucherías, me eché de nuevo a la cama a dormir. Nunca me casé. Me parece nefasto y una cojudez de sobremanera, declarar mi amor ante un cura o un notario para hacer creíble los sentimientos hacia esa persona; además, es un masoquismo misterioso pretender vivir para siempre con una sola mujer; o una mujer con un solo hombre, que idea para más antigua y retrograda que inventaron las sectas religiosas. Existiendo millones de individuos en el planeta conformarse solo con uno?. Ya llevo casi tres meses en la desorientación, desde que despidieron a todos de la empresa. Lo único bueno que obtuve de eso, fue un cheque de liquidación que lo gasté en tragos y en juegos de azar; ya no me queda mucho, estoy haciendo algunos trabajos extras para sostenerme y para que la señora del arrendamiento no me eche a la calle. Mi oficio es el arte de sustraer metódicamente un objeto material según las necesidades de mi cliente. En pocas palabras: Robar.  Al principio nunca quise aceptar mi condición, me parecía aberrante, antimoral, pero a medida que pasaba le daba vueltas al asunto; una luz reveladora me libró de todo trastorno; puesto que, a diferencia del cleptómano  mis robos son estratégicos, planeados al sumo detalle, antes de dar el golpe. Fue un amigo que se mudo al extranjero el año pasado, quien necesitaba obtener una carta poder que su ex esposa no quería entregárselo. Él quería tener otra vida con una mujer esplendorosa, la cual llegue conocerla, pero le era imposible; fue ahí cuando le propuse ayudarle; ese día estaba nervioso, tenía las piernas flexibles y una sed insaciable. Había repasado más de mil veces el mismo procedimiento; pero aún así,  era la primera vez que hurtaba algo de suma importancia y para otra persona; llevaba un gran peso sobre mi, no podía fallar. Al terminar la noche tenía en mis manos la hoja, la carta poder, lo había logrado, me vino una excitación increíble, primera vez experimentada.  Salí de la dichosa casa, con el motín bajo mis pantalones, todo estaba tranquilo, crucé por el jardín que estaba en la parte posterior; grave error. Mi amigo, se había olvidado de un detalle importantísimo, en casos como estos toda la información es precisa y él sin saberlo, lo omitió.  Me vi cara a cara con un perro bóxer; inconscientemente sabía que eso iba a pasar. Esa excitación rápidamente se convirtió en estupor, pánico; salí despavorido, pero fue innecesario, me mordió el muslo derecho; aún todavía tengo la marca de sus colmillos en el culo; como prueba de mi sacrificio. Crucé la verja con el pantalón entre mis rodillas, felizmente la sombría luz de la noche estaba a mi favor, no hubo testigos, nadie pudo identificar mi culo rosado corriendo por las calle de Lima.
Siempre uno aprende de los errores, tuve mejor panorama después de ese inconveniente. Esta vocación es como cualquier otra, la única diferencia es que si algo sale mal, te encierran en la cárcel, no hay reproche que valga, te meten adentro y a los baños con un montón de hombres calatos ansiosos por una mujer. Felizmente, hasta ahora no he caído. Esto, solo es esporádico, no puedo dedicarme al 100 % al robo, sería muy arriesgado y estúpido. Por eso trabajo en cualquier ridícula empresa recibiendo una miseria de remuneración. Sin embargo, ahora no tengo nada, ni trabajo, ni proyecto de hurto, estoy así como quien dice, frito pescadito; pero no puede extenderse por más tiempo. Me he fijado en una tienda de peluches, entre las esquina 15 y 23 de pasaje Real; una zona muy céntrica, con estricta vigilancia las 24 horas, pero yo tengo una solución para eso. http://www.facebook.com/edquinta




lunes, 25 de marzo de 2013

Cuando ya las palabras no tienen otra función que disuadir


Un minuto de su tiempo señor, cuanto hace falta para ceñir mi estado comatoso, si pudiera servirme una taza de café estaría más que contento; estaría en cierto sentido libre, inconcluso, observando las líneas diminutas de mi tragedia. Mi tragedia romántica de todos lo seres; así de lejano resultan mis concesiones del amor, esa membrana traslúcida que envuelve todo hasta asfixiarnos, señor un minuto más por favor, necesito decir algunas cosas antes que cierre la puerta; me falta el hilo conductor de mi obra para dejar en relieve mis claras pretensiones; decir por ejemplo, el otoño está cerca y tus mejillas azules por el frío, se empañan en mis ojos, tu risa enloquecida, estrepitosa, cabalga como una bestia indómita a través de mi sombra como un mal presagio. Estas diciéndome que regrese más tarde, eso es imposible, te necesito ahora, no mañana, no ves que hay tardes difusas merodeando por ahí? que tal si me pierdo en una de ellas y no vuelves a verme jamas, entonces, por qué continuas ignorándome?. Señor, ya basta! necesito un poco de privacidad, por favor, entiéndeme! ; en la oscura luz media de la noche que se enciende en mi cuarto, ya no duermen mis sueños, mas bien las pesadillas emergen de mi conciencia, como un recuerdo vivo y en ese trance la cintura estrecha de tu cuerpo me estremece, ya que se apega a mi con insistencia belicosa, y por consiguiente, el demonio del deseo me perfora las manos y la ingle, desatando los cofres empolvados del sótano. Ya te dije, que es un beso la despedida grotesca por teléfono, un beso hipócrita y doliente sin desmedida; hasta el punto de sustituir a la ira.
El señor cerró la puerta y quedé dentro del aposento vacío, sin ruido, sin gente, sin luz, completamente sólo; vi que mis manos temblaban mecánicamente,  sentí el aire gélido por mis fosas nasales y en mi estado comatoso la figura de tu nombre danza un vals sobre mi frente; ya es hora de dormir, la madrugada recae con su chispazo de tenacidad, el humo confuso de la biblia me oculta el camino al Jardín de los Fieles; ya sin ti me escapo por intuición, dejo atrás las revistas absurdas, el té helado en el parque, las golosinas rechonchas y un par de zapatos sin peso; solo quise decirte amor mío, sobre tu lápida invertida, que cuentes los deseos que tome de ti, mientras respirabas sobre mi pecho desnudo, que entre anhelo y anhelo logré esculpir tu rostro, con nuestros pobres y débiles deseos.     http://www.facebook.com/edquinta